Una alimentación adecuada ayuda a prevenir y reduce el riesgo de aparición de enfermedades, y en el caso de los ojos, la falta de ciertas vitaminas y nutrientes puede evitar o retrasar la aparición de cataratas, degeneración macular asociada a la edad, glaucoma o el desarrollo de retinopatía en pacientes diabéticos.
Está comprobado que el déficit de vitamina A afecta directamente a la salud visual: participa de la producción de la lágrima, y su distribución en la conjuntiva y en la córnea. Sin ella, pueden aparecer úlceras corneales que, al cicatrizar, pueden quitar visión de forma permanente. También es imprescindible para la producción del pigmento que consumen los fotorreceptores encargados de la visión en oscuridad. Por ello, niveles bajos de vitamina A conducen a una ceguera nocturna. La carencia de vitaminas C, D y E puede conducir a a la degeneración macular.
¿Dónde encontrar estas vitaminas, y cuáles son los mejores alimentos para una buena salud visual?
La espinaca es fuente de luteína y, en menor medida, de zeaxantina. Ambos forman parte de la retina. Tienen un efecto beneficioso sobre esta parte del ojo ya que protegen sus células del envejecimiento, con lo que previenen la pérdida de visión y la DMAE.
Los pimientos, en particular el morrón verde, tienen mucha vitamina C, vitamina E y betacaroteno. Favorece la correcta cicatrización de las heridas y fortalece el sistema inmunológico. Sus antioxidantes bloquean la acción dañina de los radicales libres, por lo que comerlos de forma regular ayuda a conservar los tejidos oculares sanos.
El salmón es fuente de ácidos grasos omega 3, que combaten la sequedad ocular y reducen en un 42% el riesgo de DMAE y en un 30% el de cataratas. Se recomienda por lo menos 2 veces por semana.
El sabido que la zanahoria es buena para la vista. Esto es porque tiene grandes cantidades de betacaroteno, que en el organismo se transforma en vitamina A. Mejora la visión nocturna, y mantiene la agudeza visual.
Los arándanos tienen gran cantidad de de vitamina C, B, betacaroteno y vitamina E. Pero su gran aporte son sus antocianinas, los pigmentos responsables de su color y de su acción antioxidante, que contribuyen a paliar la progresión del glaucoma porque facilitan la circulación sanguínea ocular.
La excusa perfecta para comer chocolate sin culpa: el cacao es rico en flavonoides, que favorecen la circulación sanguínea de los ojos, y en minerales como el zinc. Éste último protege las células de la retina de la oxidación celular y ayuda a prevenir la DMAE. Comelo sin azúcar y debe tener por lo menos un 70% de cacao para que aporte anti- oxidantes.
El té verde tiene muchas catequinas, que son antioxidantes pueden llegar hasta los tejidos oculares tras absorberse en el tracto intestinal. Aun faltan estudios, pero parecen proteger la retina y reduce el riesgo de desarrollar cataratas.
Las uvas negras tienen muchos nutrientes, pero se destacan por el resveratrol, un antioxidante que mejora el sistema vascular, por lo que favorece la microcirculación del ojo, ayudando así a prevenir el glaucoma y la retinopatía diabética.
La alimentación rica en verduras y frutas con antioxidantes y vitaminas ayuda a proteger el ojo. Con solo incluir algunas de estas comidas en tu dieta diaria te podés asegurar una mejor salud visual y en general.
Fuente: www.sabervivirtv.com/ y www.infosalus.com